Este sábado se llevó a cabo la ceremonia de proclamación del rey Carlos III, quien es ya oficialmente rey de Reino Unido. Esto, a dos días de que se anunciara el fallecimiento de la reina Isabel II a sus 96 años.

Aunque Carlos III sucedió a la reina inmediatamente luego de su muerte, es este el evento que tradicionalmente lo proclama como monarca ante el poder político británico.

El evento se produjo en el palacio de St. James, y tuvo dos etapas. La primera correspondió a la ascensión, la que se produjo en una sala dentro del palacio, donde se firmaron los documentos. 

Fue transmitida por televisión y contó con la presencia de miembros del Consejo de Ascensión, conformado por 700 personas, entre ellas políticos, miembros de la iglesia y la nobleza.

Fue aquí donde se acordó que el día de funeral  de la reina Isabel II será feriado, aunque aún no se sabe el día exacto (podría ser un 18 de septiembre).

Posteriormente, se llevó a cabo la proclamación del rey en uno de los balcones y que fue llevada a cabo por un funcionario conocido como Rey de Armas Principal de la Jarretera.

Discurso de Carlos III

Este viernes, el nuevo rey dio un discurso en el que expresó su tristeza por la muerte de su madre, a la vez que rememoró el transcurso de la reina en sus 70 años como monarca.

“A través de los cambios y los desafíos, nuestra nación y la gran familia de reinos -de cuyos talentos, tradiciones y logros estoy tan inefablemente orgulloso- han prosperado y florecido. Nuestros valores han permanecido, y seguirán permaneciendo, constantes”, señaló.

También agradeció y se refirió a los miembros de su familia:

“Este también es un momento de cambio para mi familia. Cuento con la estimable ayuda de mi querida esposa, Camila”.

“Como heredero mío, William asume ahora los títulos escoceses que tanto han significado para mí”, señaló.

“También quiero expresar mi amor por Harry y Meghan mientras continúan construyendo sus vidas en el extranjero”, continuó.

Finalmente se despidió de su madre: “Y a mi amada mamá, en el momento en que empiezas tu último gran viaje para acompañar a mi querido papá fallecido, simplemente quiero decir: gracias. Gracias por tu amor y tu devoción con nuestra familia y la familia de las naciones que serviste de forma tan diligente todos estos años.

Que los ángeles y sus cantos te acompañen a tu eterno descanso”.