La cantante María José Quintanilla estuvo en Sigamos de Largo, ocasión en la que recordó a su padre quien falleció en 2008 cuando ella tenía apenas 17 años.

“Partió joven, porque tuvo una lucha súper larga mi papá, diagnosticado muy joven de una enfermedad que hasta ese momento en Chile no era muy conocida, que era la poliartritis reumatoide”, señaló la cantante sobre la complicada salud que tuvo su padre durante años. “Era una enfermedad que en ese tiempo no había un tratamiento que dijera Ya, este medicamento es para estos síntomas. Hoy día sí hay un tratamiento un poco más efectivo. El tratamiento que había era muy costoso, y no lo podía asumir mi familia. Mi papá en un tiempo fue como, entre comillas, conejillo de indias de todos lo que hoy día se atienden en esta enfermedad y que tienen ese remedio”, expresó María José.

Luego, la cantante continuó hablando sobre la dura enfermedad de su padre: “Pasó por todas las terapias, entonces muchas veces mi papá, cuando yo nací, estuvo postrado harto tiempo. Yo fui la compañía, porque él estaba acostado conmigo ahí, y mi mamá ahí pa’ allá, pa´ acá, hay que hacer esto… Entonces yo crecí en una casa donde todos teníamos nuestro rol y quien no lo cumplía, entonces desordenaba y desorganizaba todo, con una mamá muy luchona. Y mi papá que le ganó a volver a caminar, y yo tengo eso muy presente, que como todos nos pasa algo por algo”, manifestó emocionada.

María José habló de la importancia de su padre en su vida

“Para mí es un bacán, yo sé que está siempre presente en todas las cosas que hago, que a veces está prendiendo esa velita que necesito para achuntarle justo a ese proyecto, o a veces deja caer proyectos que al final uno dice Mmm por algo pasan las cosas”, dijo la cantante sobre lo que ha significado su padre en su vida, cuando estaba vivo y también ahora.

Al respecto, ella siente que su papá la preparó para enfrentarse a la vida desde los 16 años: “Él se encargó de darme tips. Nosotros con mi papá teníamos una conversación muy directa, muy frontal, donde yo podía conversar con él cualquier cosa con él y no era ni sorprendente ni nada, y buscábamos una solución. Él tenía un sentido de la vida distinto, porque sabía que, quizá estaba más cerca de perderla. Yo eso siento, al menos, que me enseñó el disfruta el hoy día, no te amargues por tonteras, pasalo chancho, haz lo que te gusta, pero de verdad, no por cumplir, porque al final esa mochila se carga y comienza ser muy pesada”, aseguró la cantante.