02:03:36
En “Socios de la Parrilla”, Pancho Saavedra, Jorge Zabaleta y Pedro Ruminot conversan con animadora Pamela Díaz y la cantante Denise Rosenthal.
En la conversación, Denise Rosenthal revivió su paso en la TV con la serie “Amango”, en 2007. “Cuando quedé en el casting dije ‘Ya, filo, de aquí nadie se va a acordar, va a ser una serie juvenil más’. Y generó un revuelo que jamás me imaginé”, recordará la cantante de “Cambio de piel”, quien además rememoró con cariño el icónico spin-off de la serie con su personaje, titulado “El blog de la Feña”.
“Yo soy súper autocrítica y exigente conmigo misma, entonces me abrazo en esa época, era muy profesional. Yo grababa tres días seguidos sólo monólogos, unos párrafos heavy, todo el día sentada frente a una cámara. Tenía 17 años, entremedio iba al colegio”, contó
Por su parte, Pamela Díaz recordó su paso por Miss 17, en 1998, donde obtuvo el segundo lugar. “No me sirvió de nada ese concurso, porque no gané nada. Fue una lata, y ahí supe que los concursos están arreglados. Me cargan los concursos, participé en 10 y en los 10 salí segunda”, repasó la exmodelo, quien además profundizará sobre su vida amorosa haciendo un repaso por los que cree que fueron sus verdaderos amores.
Te puede interesar
“Una vidente, Latife, me dijo que yo iba a tener cuatro amores en mi vida. Ya he tenido tres amores. El primero es por supuesto Manuel (Neira), que es papá de mis hijos. El segundo fue (Rodrigo) Wainraihgt, porque después de esa relación estuve con él, vivimos juntos y bacán todo. El tercero fue Jeanphi (Cretton). Y te juro que yo pensé que me había enamorado del papá de la Pascuala (Fernando Téllez), pero no fue así, no me enamoré. Entonces me queda uno más para completar los cuatro”, sostuvo la llamada "Fiera”.
Además, el capítulo contó con la presencia del comediante e imitador Stefan Kramer, quien se lució con una impresionante imitación. Caracterizado como el astro mexicano Luis Miguel, el comediante hizo reír a los “Socios” y a las dos invitadas con una rutina donde adjudicará su delgadez a una técnica llamada “ayuno interminable”.